Gestión de almacén: Conceptos clave y diferencias que sí o si tienes que saber

¡Imagina poder optimizar tu flujo de trabajo y reducir los costos operativos en tu empresa! La gestión de almacén es fundamental para cualquier negocio que maneje productos físicos, pero a menudo se subestima su impacto en la eficiencia y rentabilidad. 

¿Sabías que la gestión de almacenes es un proceso crítico dentro de la cadena de suministro debido a que se encarga de la administración de los inventarios y, en la mayoría de los casos gestiona las necesidades de los clientes de la empresa?

Sin una gestión de almacén efectiva es más fácil que se produzcan ineficiencias en sus operaciones, pérdidas de productos y una disminución en la satisfacción del cliente. 

¿Estás listo para mejorar y mantener tus prácticas de gestión de almacén? Sigue leyendo para descubrir cómo puedes optimizar tus procesos y llevar tu gestión de almacén al siguiente nivel

¿Que es gestión de almacén?

La gestión de almacenes abarca el conjunto de actividades necesarias para supervisar y controlar las operaciones diarias de un almacén. Implica la implementación de procedimientos clave que garantizan un flujo eficiente de tareas como:

  • La recepción
  • El control de inventario
  • El almacenamiento
  • El empaquetado
  • La distribución de productos. 

Frecuentemente, se emplea indistintamente la gestión de almacenes y la gestión de inventarios, lo que puede ocasionar cierta confusión sobre su propósito central y sus diferencias. Veamos su diferencia.

Diferencia con la gestión de inventario

La gestión de inventarios se enfoca en una unidad de negocio específica para garantizar un número preciso de productos disponibles en los centros de distribución para alimentar la cadena de suministro. Utiliza datos relevantes, como tendencias de ventas y demandas estacionales, para prever los niveles de existencias necesarios y satisfacer las demandas del mercado.

Por otro lado, la gestión de almacenes abarca una perspectiva más general que considera todos los aspectos relacionados con el mantenimiento de los almacenes. Esto incluye:

Además, supervisa las políticas y los procedimientos involucrados en las operaciones eficientes de los almacenes, utilizando recursos como el personal, el equipo y los productos terminados.

Diferencia con la gestión de stock

La gestión de stock se centra específicamente en el control de los niveles de existencias de productos en un momento determinado. Se ocupa principalmente de supervisar y mantener la cantidad óptima de productos disponibles en el almacén en un momento específico. 

Tiene en cuenta factores como: 

  • La demanda
  • Los ciclos de producción 
  • Las tendencias del mercado. 

Por lo tanto, la gestión de stock se relaciona más con el mantenimiento de un equilibrio entre el inventario disponible y la demanda del mercado en un período de tiempo determinado.

Un trabajador de un almacén
La gestión de almacenes suele ser más adecuada para empresas grandes con operaciones complejas, mientras que la gestión de inventarios puede ser suficiente para empresas más pequeñas.

¿Cómo se gestiona un almacén de manera efectiva?

La gestión efectiva de un almacén implica una coordinación precisa de varios procesos interconectados para garantizar un flujo eficiente de productos y servicios. Con base en los seis pasos fundamentales de la gestión de almacenes descritos, una estrategia eficaz se puede definir de la siguiente manera:

Recepción

La recepción cuidadosa y minuciosa de los artículos entrantes es esencial para identificar y abordar cualquier problema potencial de inmediato. Esto implica realizar:

  • Controles de calidad
  • Verificar las cantidades
  • Verificar condiciones de los productos
  • Resolver cualquier discrepancia con los proveedores.

Retirada

El proceso de retirada se centra en el traslado seguro y eficiente de los artículos desde los muelles de recepción a sus ubicaciones de almacenamiento designadas.

Almacenamiento

La organización y disposición adecuada de los productos en el almacén son cruciales para optimizar el uso del espacio y garantizar la accesibilidad. Es esencial mantener la seguridad de los artículos, especialmente para aquellos que requieren condiciones específicas de almacenamiento.

Recolección

La recolección eficiente de los artículos solicitados para cumplir con los pedidos de los clientes es vital para la satisfacción del cliente y la rentabilidad del almacén. Minimizar errores y reducir los costos asociados con la mano de obra en este proceso puede lograrse mediante la implementación de estrategias de recogida efectivas y sistemas de seguimiento de pedidos precisos.

Embalaje

El proceso de embalaje en la gestión de almacén implica garantizar la integridad de los productos durante el transporte y la entrega. Utilizar materiales de embalaje y empaque adecuados y cumplir con los estándares de precisión en el etiquetado es esencial para mantener la satisfacción del cliente.

Envío

La entrega o envío final es una etapa crucial en la gestión del almacén, ya que implica coordinar cuidadosamente la logística de transporte y garantizar la entrega oportuna y precisa de los productos.

En esta etapa, también se considera el last mile.

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¿Gestión propia o subcontratación?

¿Estás pensando en cuál es tu mejor opción para gestionar tu inventario? Veamos las ventajas y desventajas de la gestión propia y la subcontratación en la gestión de almacenes:

Ventajas de la gestión propia:

  1. Mayor grado de control: La gestión interna permite un control directo sobre todas las operaciones del almacenamiento de mercancías.
  2. Menos costoso a largo plazo: En general, puede resultar más económico a largo plazo operar y administrar un almacén internamente.
  3. Optimización del recurso humano: Permite un mayor control y desarrollo del personal, lo que puede mejorar la eficiencia y la lealtad de los empleados.
  4. Beneficios fiscales: Algunas estructuras fiscales pueden favorecer a las empresas que gestionan sus almacenes internamente.
  5. Beneficios intangibles: La gestión propia puede proporcionar beneficios intangibles como una mejor comprensión del negocio y una mayor integración en la cadena de suministro.

Desventajas de la gestión propia:

  1. Carencia de flexibilidad: Puede resultar más difícil adaptarse rápidamente a cambios en la demanda o en el mercado.
  2. Restricciones financieras: La gestión interna del almacén puede requerir una inversión inicial significativa y puede limitar la flexibilidad financiera de la empresa.
  3. Retorno de la inversión: El retorno de la inversión puede llevar más tiempo en comparación con la subcontratación, especialmente si se requiere una inversión inicial considerable.

Ventajas de la subcontratación:

  1. Conservación del capital: Permite a la empresa conservar el capital y usarlo para otros fines comerciales.
  2. Aumento del espacio de almacén para cubrir picos de demanda: La subcontratación puede proporcionar una mayor flexibilidad para ampliar el espacio de almacenamiento cuando sea necesario para cubrir fluctuaciones en la demanda.
  3. Riesgo reducido: La responsabilidad de la gestión operativa recae en el proveedor de servicios, lo que puede reducir el riesgo operativo para la empresa.
  4. Economías de escala: Los proveedores de servicios logísticos a menudo pueden aprovechar economías de escala para reducir los costos operativos.
  5. Flexibilidad: Permite adaptarse más rápidamente a los cambios en la demanda y a las condiciones del mercado.

Desventajas de la subcontratación:

  1. Problemas de comunicación: Puede haber desafíos de comunicación entre la empresa y el proveedor de servicios logísticos, lo que puede afectar la eficiencia operativa.
  2. Carencia de servicios especializados: Algunos proveedores de servicios pueden no ofrecer servicios especializados que la empresa pueda requerir.
  3. El espacio puede no estar disponible: En momentos de alta demanda, puede haber escasez de espacio en los proveedores de servicios externos.

Conclusión

Es vital comprender que la gestión de almacenes no solo implica la administración de inventarios y operaciones diarias, sino que también impacta directamente en la satisfacción del cliente y la rentabilidad a largo plazo.

Invertir en sistemas de gestión de almacenes innovadores y capacitar a los empleados para utilizar estas herramientas pueden allanar el camino para un mayor crecimiento y éxito en un entorno empresarial en constante evolución.

La clave radica en la adaptación continua, la integración de tecnologías innovadoras y la búsqueda constante de eficiencia y excelencia.

¡No dejes que la gestión de almacenes sea un obstáculo para el éxito de tu empresa! Actúa ahora y adopta prácticas efectivas para llevar tu gestión de almacenes al siguiente nivel.

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